Viaje a Barcelona vol.2

Continuo con la saga de experiencias en mi viaje a Barcelona. Nos levantamos como pudimos, aunque ya a las 9:00 entraba Mario para saber si alguna de nosotras quería desayunar. Delia que ella es muy eficiente y se levanta enseguida fue con él. El resto estuvimos remoloneandonos un rato más en la cama... fue Nerea a desayunar y me dijo que por lo menos algo bueno tenía el hostalucho. Pero eso si ibas pronto, porque cuando fui yo... apenas quedaba nada.

Cada uno desayunaba y se duchaba a su ritmo... que ahora viene el tema de las duchas. Afortunadamente teníamos el nuestro justo en frente y nos podíamos guardar los turnos para que no nos lo quitasen. Nos miraban mal, obviamente... pero ¡que se vayan a otro! tsss.  Intentábamos estar lo menos posible allí... y nos cambiábamos en la habitación para que ni un cm de tela de nuestra ropa rozase el suelo. Nos dejábamos las chanclas y los geles porque la mitad no teníamos. Una vez todos listos salimos a descubrir mundo.

Nuestro destino era el Parque Güell en la otra punta de Barcelona, cogeríamos un autobús. Nos compramos un billete de estos para turistas de 4 días y para allí que nos fuimos. Aunque en el camino pudimos disfrutar de la Pedrera y la Casa de Gaudi. Aunque nuestro hostal estuviese muy bien ubicado en las ramblas... teníamos que andar bastante hasta Plaza Cataluña que es allí donde se cocía todo. A todo esto, la maleta de Irene no llegó y tuvo que ir al aeropuerto a reclamar su maleta y su mochila, Aldo que es un ángel caído del cielo fue a acompañarla.


Llegamos al parque y era una preciosidad tras otra... yo no dejaba de hacer fotos, de hecho hice tantas que no se cuales poneros aquí en el blog. Pondré pocas porque el resto ya las subí a facebook y a tuenti así que las podéis ver allí. Hacía calorcete y teníamos muy poca agua... dimos un bonito y tranquilo paseo contemplando cada detalle, cada árbol plantado en su sitio, una jodida maravilla, vamos. Había gente vendiendo cosas y tocando música, y a esta gente es ponerle música y ponerse a bailar. Jairo y Delia lo dieron todo... y Marina y Mario no se quedaron atrás. Conseguimos avanzar y seguir viendo todo el parque que pequeño no es. Nos encontramos también con una especie de monje que invitaba a la gente a luchar contra él. A Sixto le metió una paliza.... pero Delia se defendía bien.

Descansamos mientras esperamos a que llegasen Irene y Aldo, después nos fuimos a comer, no sin antes contemplar al famoso Dragón (era imposible hacerse fotos con el, demasiada gente). Comimos en una terracita, muy bonita la verdad de un restaurante, unos bocadillos bastante buenos, nos invitaron a cerveza y café. Una vez con fuerzas nos dirigimos a ver la Sagrada Familia.

Caminamos muuuucho, como siempre... porque allí todo esta muy lejos de todo y estuvimos esperando como media hora al autobús que teníamos que coger. Llegaban todos menos el nuestro... pero por fin pudimos subirnos y llegar. Andamos un poco y ya vimos desde lejos la estructura. La gente se puso a hacer el capullo, que en eso son expertos y se ponían a correr como posesos. Llegamos y... buah... impresionante. No me lo esperaba así para nada. Es lo típico que lo ves en libros, en documentales, etc. pero cuando lo ves es totalmente diferente. Es enorme, altísimo, con tanto detalle junto, es otra jodida maravilla. Además hice fotacos porque la luz era muy buena... la parte moderna la verdad que bueno... no se puede comprar con la fachada principal. Nos quedamos un buen rato observando el colosal edificio.

Cuando estábamos mirando, vimos como un globo subía y dice Mario "a ver quien llora..." y justo se oye a un niño llorar... nos reímos y nos vio la madre que casi nos mata con la mirada. Lo más gracioso es que el globo ascendía, ascendía y se coló dentro de la Sagrada Familia.

Después de estar embobados contemplando todo aquello, decidimos volver al hostal y hacer una lista de lo que queríamos comprar, en plan cena y comida (bocadillos). Llegamos cansadísimos... y unos cuantos se fueron a un caprabo que había cerca. El resto en la habitación de cháchara cuando nos llaman y nos dicen que necesitan a más gente para cargar con las bolsas. Allá que fuimos Aldo, Sixto y yo. Bien, los TRES SUBNORMALES. Os explico; yo me oriento fatal, y a Aldo le dijeron la cuarta calle a la derecha... yo iba siguiendo a Aldo, recibí un sms de Anabel y la llamé. Aldo llamó a un amigo suyo y Sixto recibió una llamada. Vale, los tres andando y hablando por el movil... ¿que ocurrió? Que nos perdimos -.-u

Aldo decía que me seguía a mi, y yo le seguía a él... Sixto seguía hablando por teléfono. Nos llamaron diciendo que ya no hacía falta que fuésemos, que ellos podían solos. Bien, un alivio, pero a ver como volvíamos nosotros. Total, que llegamos al caprabo, tuvimos dignidad de encontrarlo por lo menos... luego al final conseguimos llegar al hostal.

A estos les dieron una habitación en la misma planta que la nuestra, no tendrían que volver a ver a ese hombre con los pies negros (al que bautizamos como "piesnes" y que por cierto seguía dormido cuando salimos por la mañana). Así que tocaba asentamiento allí. Salíamos de vez en cuando a que nos diese el aire a un balconcito muy bonito que había en el comedor, y ahí halábamos y fichabamos a guiris. Total, que llegan Sixto y Jairo y no sé cómo Sixto se hizo amigo de dos alemanas y había quedado con ellas y un argentino (que le molaba a Marina) en 5 min en la puerta para irnos de fiesta. Marina y yo flipando sin saber que hacer... Al final fuimos los cuatro porque el resto no se quería mover. Nos juntamos estos que he citado, más el hermano del argentino más un americano y el tio que llevaba el hostal que nos llevo a un garito que estaba muy bien la verdad. A mi me gustó, estaba todo lleno guiris y la música estaba bastante bien, todo el mundo muy sociable aunque nosotros cuatro nos quedamos ahí, no nos relacionamos con los que fuimos.

Lo gracioso llega al irnos, que íbamos Marina y yo delante y Jairo y Sixto detrás... pues veo a un hombre meando y me sorprendí... el tío se notaba que quería camorra y casi la tiene con Sixto, porque se había inventado que le había llamado hijo de puta y Sixto;

-Haya paz...

-¿CÓMO QUE QUÉ PASA?

-He dicho que haya paz

-Ah, bueno...

Y en ese momento aparece un travelo con baldosas en la mano y nos las empieza a tirar gritando:

-DEJAD EN PAZ A MI MARIDOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

Yo de verdad que no entendía nada ni daba crédito a lo que estaba viendo, y encima viene el hombre este que quería guerra y me suelta:

-Iros de aquí, que mi hermana es esquizofrénica 

Eso ya me mató... y tuvimos que irnos, claro porque bueno... tenía el detalle de tirarnoslas pero al suelo, que me da una en la cabeza y me mata.

Estábamos muertos, porque como no... el local estaba lejísimos del hostal y la vuelta se me hizo eterna, me limitaba a escuchar la conversación entre Marina y una de las alemanas, en inglés claro... y me enteré de todo. Al llegar, abrí la puerta, cogí el tarrito de las lentillas, me las quité y vestida y todo me tumbé en la cama a intentar dormir porque Cris seguía roncando. Eran las 4 cuando llegué y al día siguiente a las 9 vendría Mario a despertarnos

Imaginaros cómo me levante... pero eso en la próxima entrega amigos ;)